Los neumáticos no se pueden montar de cualquier manera

Abordamos un tema que afecta por igual a todos los neumáticos: su correcta colocación. No hacerlo bien implica perder rendimiento, además de suponer un peligro real en carretera que deberías evitar a toda costa.

En general, cuando no tienen posición, el procedimiento no incluye grandes dificultades. Basta con asegurarte de que el número DOT quede situado en la cara exterior. De esta manera, durante la ITV, resultará más fácil comprobar su homologación. Los neumáticos direccionales y asimétricos, en cambio, sí exigen cuidados y conocimientos especiales.

PROCESO BÁSICO PARA MONTAR NEUMÁTICOS

Una mala colocación deriva en continuados problemas de los neumáticos, dado que pierden funcionalidad y rendimiento. Los expertos utilizan una máquina especial para desmontarlos y montarlos con seguridad, agilidad y sencillez.

En general, podemos resumir esta tarea en estos pasos consecutivos:

1. Elevación del automóvil para retirar la rueda. Para quitar el aire con seguridad, se desenrosca el obús de la válvula.
2. Se desmonta el neumático de la llanta.
3. Se comprueba el tamaño del neumático y sus características para confirmar que es apropiado.
4. Coloca el neumático nuevo en la llanta, empezando por el flanco inferior.
5. Ya montado, se infla de aire hasta la presión correcta.
6. Para terminar, se realiza el proceso de equilibrado. Es imprescindible para compensar los desajustes, eliminar las vibraciones en el volante y aumentar el confort al conducir.

Para evitar múltiples problemas de los neumáticos, ten presente que no puedes colocarlos de cualquier manera. Así, por ejemplo, los que tienen una banda de rodadura en mejor estado han de situarse en la parte trasera. De este modo, ganarás estabilidad de conducción.

Otro consejo habitual de los especialistas es intercambiarlos entre los ejes. De este modo, el desgaste se distribuye de forma equilibrada y alargas su vida útil.

Ahora bien, existe una dificultad adicional cuando se trata de colocar neumáticos asimétricos y direccionales. ¡Deben ponerse de una manera muy concreta para optimizar su funcionamiento!

CLAVES PARA EL MONTAJE DE LOS NEUMÁTICOS ASIMÉTRICOS

Las partes interna y externa de estos neumáticos son distintas. Con el propósito de evitar errores al colocarlos, incluyen en el flanco los siguientes marcajes:

• OUTSIDE. Para la parte exterior.
• INSIDE. Para la interior.

Gracias a su fisonomía, los tacos mayores localizados en el exterior proporcionan un agarre superior en las curvas y al conducir en seco. Por su parte, las características interiores de estos neumáticos ayudan sobre las carreteras mojadas. Como consecuencia, se suelen poner en coches con motores potentes que suelen desenvolverse a gran velocidad.

Si intercambias su posición al instalar los neumáticos asimétricos, vas a enfrentarte con claros problemas nada más ponerlos. En concreto:

• En carreteras secas, la tracción y la precisión se diluyen. Sin embargo, aumenta el ruido.
• Sobre firmes mojados, la velocidad desciende y el aquaplaning puede producirse más facilmente. Si trazas una curva con dinamismo, puedes perder el agarre.

La prueba del algodón y la referencia fundamental para el montaje de esta clase de neumáticos es la lectura del término OUTSIDE. Sí o sí, tienes que poder leerlo tras el montaje, porque debe quedar alineado con la parte exterior de la llanta.

Solo cuando están perfectamente instalados podrás aprovechar todas sus prestaciones al completo. Tu seguridad y control serán mayores y la banda de la rodadura se irá desgastando de modo más lento y uniforme.

Este error de instalación, producido por desconocimiento es relativamente frecuente entre los usuarios autosuficientes que no recurren a especialistas para cambiar sus neumáticos.

UBICACIÓN DE LOS NEUMÁTICOS DIRECCIONALES

Los neumáticos direccionales han sido concebidos para proporcionar una experiencia de conducción optimizada, tanto en zonas secas como húmedas. Aseguran una tracción más idónea, reducen la distancia de frenado y el efecto de balanceo.

Para distinguirlos y facilitar el montaje, incluyen una flecha —que puede asociarse también a la palabra ROTATION— u otro símbolo distintivo similar. Únicamente has de tomar la precaución de colocar el neumático con la punta de la flecha señalando el frontal del automóvil.

Como recurso de verificación, una vez montados, colócate delante de tu coche y mira los neumáticos recién puestos. Asegúrate de que sus ranuras forman una uve con la punta dirigida hacia abajo.

Estos neumáticos se pueden permutar de delante a atrás, pero resulta más complejo intercambiarlos de modo horizontal. Para ello es necesario desmontar el neumático de la llanta, con el fin de que al montarlo en la nueva mantenga el sentido del giro.

Su correcto montaje garantiza una tracción mejorada sobre suelo mojado y nevado. Se utilizan habitualmente en coches deportivos y en los vehículos habituados a circular sobre carreras húmedas. Evitan, bien instalados, algunas deficiencias y problemas de los neumáticos convencionales.

Ahora ya tienes más claro cómo debes tener colocados los neumáticos más complicados, los asimétricos y los direccionales. Es por ello la importancia de recurrir a un especialista para realizar el trabajo correctamente, puedes encontrar el más cercano aquí.